El jardín del sur

¿Qué ocurre cuándo la superstición y la fantasía se cruzan con la crueldad?

Este libro, que tiene un subtítulo muy sugestivo, Los casos reales más bestias de la historia del true crime, me ha encantado. En cuanto vi su portada, leí su resumen y eché un vistazo a su interior, me dije: «Oh, sí. Tengo que leerlo. Sé que me va a gustar. Lo sé. Sé que lo voy a disfrutar». Y así ha sido. He disfrutado con la prosa fluida y limpia de su autora, Estela Naïad; y con las ilustraciones, algunas aterradoras, de Meritxell Ribas Puigmal. Ilustraciones que dan ganas —si no fuera porque se estropearía el libro—, de colgar por el despacho. En mi caso, cerca de mi corcho de escritura. Algunas son una fuente excelente de inspiración. Os invito a entrar en la página web de Ribas Puigmal y descubrir su trabajo.

El libro no solo es bonito, también tiene una prosa sencilla con una buena carga documental y su correspondiente parte de superstición. Mezcla que hace que sea una lectura atractiva y que cada una de las secciones o apartados en los que se divide resulten muy sugerentes. Tenemos vampiros, hombres lobo, brujas y otros monstruos. Personalmente, me han gustado mucho los capítulos de los vampiros y las brujas. También algunos de los monstruos escogidos en la última sección (otros monstruos). Si bien, todos los capítulos resultan entretenidos e interesantes. He aprendido mucho. Había cosas que creía saber y, en realidad, me he dado cuenta de que no las conocía de verdad. Los ejemplos más claros a este respecto son el de Enriqueta Martí (la vampira de Barcelona), Romasanta (el hombre lobo gallego) y Mary Bateman (la bruja de Yorkshire). Sobre Bateman, he de decir que, no sé por qué, siento cierta admiración. No por sus crímenes, claro, pero sí por su perseverancia. Incluso después de ser detenida, ella siguió a lo suyo. No os cuento cómo y qué hacía —prefiero que lo leáis—, pero, desde luego, era una mujer tenaz y muy aplicada. Como autora, me he quedado enamorada del personaje.

Monstruos criminales es una obra compuesta por información real y por los mitos que a la postre se crearon a través de algunos de los personajes que aparecen. Un volumen que intenta llegar al porqué de cada acción y de cada protagonista. Averiguar y explicar cómo llegaron a convertirse en esos monstruos de los que después tanto hemos oído hablar. Un viaje que se adentra en lo más oscuro de cada caso, utilizando los detalles reales e históricos para que entendamos quién, dónde, cómo, por qué y cuándo. Para que entendamos todo lo que rodeó a estas figuras, algunas convertidas después en leyendas, que incluso llegaron a asegurar que de verdad eran los monstruos que todos decían para evitar juicios y sentencias condenatorias. A algunos les salió bien. Consiguieron, al menos, evitar la pena de muerte. A otros, en cambio, de nada les sirvió.  

Un libro muy interesante que nos cuenta casos de crímenes reales asociados durante años, hoy también, a la creencia popular de la existencia de determinados monstruos en una edición muy cuidada en fondo y forma. Además nos servirá para apuntar atractivas lecturas futuras sobre parecidos temas. También películas.

Sinopsis: Creer que los monstruos existen solo en el folklore nos da cierta tranquilidad. Sin embargo, la historia está llena de criaturas más crueles que los de las propias leyendas. Hombres y mujeres de carne y hueso que, creyéndose brujas, vampiros u hombres lobo, perpetraron crímenes que estremecieron a la humanidad. Entre las filas de asesinos más despiadados del mundo, se encuentran monstruos tan reales como la vampira Elizabeth Bathory, que cometió actos atroces contra cientos de jóvenes; Romasanta, el hombre lobo gallego, que se enriqueció vendiendo la grasa de sus víctimas; o Mary Bateman, la bruja de Yorkshire, que cometió asesinatos valiéndose de sus supuestos poderes mágicos.