El jardín del sur

Al pensar en cómo felicitaros este Día de las Bibliotecas, he decidido hacerlo de la manera más sencilla, con una imagen de mi yo estudiante. Un fotografía de cuando me pasaba media vida en las bibliotecas para hacer trabajos y estudiar; de cuando, por fin, al cambiar de ciclo en la carrera, te dejaban ir a la planta de consulta, esa restringida en la que el silencio y el olor del saber te convertían en mejor pensador. Así, al menos, era como yo lo sentía.

Hoy confieso que, lo digo en algunas de mis redes sociales y también quiero decirlo aquí, en este portal que comparto con vosotros y que juntos hemos convertido en un gran jardín, aquella chica que adoraba el silencio (hoy todavía lo adoro) y le encantaba esa zona restringida de la biblioteca, era la misma que soñaba con escribir.

Qué paradoja que su yo futuro hoy le felicite este día y le diga que no se preocupe tanto porque, cuando mire atrás, verá que tiene motivos para estar orgullosa de lo que ha logrado. Orgullosa también de no haberse rendido nunca, aunque el camino se torciera.

¡Feliz Día de las Bibliotecas! Seguiremos soñando entre libros.