La 32 edición de la Semana Negra de Gijón ha llegado a su fin y ha batido récords de visitantes y de venta de libros. También de autores, pues es la edición en la que más escritores han participado (142) y, durante su celebración, allí he estado yo para hoy contaros en el blog, a mi manera, cómo la he vivido.
Empezaré explicando, para los que desconozcáis cómo es esta muestra, que no se trata de una feria literaria al uso. Hay casetas con librerías y algunas editoriales, pero lo que más abunda son los tenderetes de libros de segunda mano, puestos de mercadillo (entiéndase ropa, joyas, juguetes, bolsos, souvenirs, etc.), quioscos de bebida y comida, y atracciones o, como las llamamos algunos, barracas. También hay tres carpas de más tamaño que es donde se hacen los encuentros y presentaciones literarias y las firmas de libros. Todo ello al lado del mar.
Hay quien acude a la Semana Negra por los autores y quien lo hace para estar de fiesta. Todo cabe en esta semana cultural y se mezcla. Hay quien va a lucir palmito, beber y comer, y los hay que acuden a comprar libros y conocer a escritores. Hay quien asiste en familia o solos. Es una combinación, digamos, curiosa. Sobre si es adecuada o no (tanto en tipo de gente, ubicación, horarios, etc.), no voy a entrar. No es este lugar para debatir esos asuntos. Sí os diré que a mí me gusta mucho y la disfruto al máximo. Sigue leyendo «La otra crónica: La Semana Negra de Gijón»