Hoy se estrena el prólogo de Ahora Quini, un podcast creado por El Comercio sobre Enrique Castro González, Quini. Un trabajo inmersivo, de investigación y nueva narrativa para no solo conocer, también sentir una vida. Una vida entera.
Y ahí me tenéis a mí. He colaborado en la escritura de los guiones y os invito a todos a que no os perdáis ningún capítulo de este fantástico podcast. Descubriréis tanta pasión como dolor; tanto amor como sufrimiento en la vida de un hombre que fue mucho más que su leyenda.
Hoy se estrena el prólogo de Ahora Quini, un podcast creado por El Comercio sobre Enrique Castro González, Quini. Un trabajo inmersivo, de investigación y nueva narrativa para no solo conocer, también sentir una vida. Una vida entera.
Y ahí me tenéis a mí. He colaborado en la escritura de los guiones y os invito a todos a que no os perdáis ningún capítulo de este fantástico podcast. Descubriréis tanta pasión como dolor; tanto amor como sufrimiento en la vida de un hombre que fue mucho más que su leyenda.
Hoy hace exactamente diez años, diez, que este jardín abrió sus puertas. Diez años desde que decidiera, una lluviosa tarde de febrero, frente a un jardín que daba al sur, crear un lugar donde compartir con vosotros mis experiencias en el mundo de las letras. Aquel primer mes solo 17 fuisteis los que os acercasteis a este especial portal literario; hoy sois miles.
De verdad que no sabía que estos pequeños textos inspirados por las fotografías o pinturas que otros usuarios comparten en Twiter os iban a gustar tanto. A mí me encanta escribirlos y participar en estos retos siempre que puedo o me siento inspirada. Es un forma maravillosa de desarrollar la creatividad, mejorar la escritura y, en definitiva, de crear. No dejan de ser historias en miniatura, pero historias al fin y al cabo. Os animo a probar.
Abrazar: «ceñir con los brazos; estrechar entre los brazos en señal de cariño». Una de las palabras más bonitas del #diccionario y quizá con más sinónimos.
Hoy es el día del abrazo. Día de rodear y ceñir. ¿Cuántos abrazos podemos dar en un día? ¿Y en toda una vida? Porque la vida sin abrazos sería una porquería.