
«Hay dos tipos de escritores: los jardineros y los arquitectos. El arquitecto planifica toda la casa antes de martillar el primer clavo; dibuja esquemas, sabe cuán profundo debe cavar para hacer el sótano, cuántas habitaciones habrá y dónde irán las tuberías. Luego tenemos a los jardineros que cavan un agujero, plantan una semilla y la riegan con su sangre, y después ven qué sale e intentan darle forma. Soy más jardinero que arquitecto».
En España, este tipo de escritores se corresponderían con los llamados escritor mapa y escritor brújula.
El escritor mapa es aquel que lo planifica todo al detalle antes de abordar la escritura. Desde que tiene la idea o esta nace, piensa en sus personajes, los analiza y perfila, define la mejor estructura para su obra, el tipo de narrador, el desenlace, etc. Se podría decir que un escritor mapa sabe siempre qué va a escribir en cada momento. Y se les denomina así porque su trabajo está guiado por una suerte de mapa, diseñado y compuesto por todo el trabajo previo que realiza entes de ponerse a escribir, y que le guiará en su camino hacia la equis marcada, hacia el final deseado.

Por su parte, el llamado escritor brújula es aquel que se deja conducir únicamente por su instinto creativo. No planifica ni prepara el proceso antes de comenzar y se deja llevar por su intuición. No sigue reglas preestablecidas y construye la historia, el ambiente, los personajes, etc., sobre la marcha. Se deja pilotar por su imaginación e inspiración que son su brújula.
Básicamente, esta sería la descripción elemental de ambos tipos de escritores. Ya veis que son formas distintas de afrontar la escritura. Uno es más metódico mientras que el otro es más anárquico. ¿Cuál es mejor? No lo sé. Depende de cada uno. Yo, por ejemplo, soy una escritora mapa. Desde que tengo la idea, planifico. Y siempre sé a dónde quiero ir. El final, para mí, es primordial. Esto no quiere decir que no deje nada a la improvisación o que no me deje guiar por mi instinto. Simplemente soy minuciosa en la planificación previa. El primer capítulo de cada una de mis historias, lo escribo directamente en el ordenador y los siguientes, en cuadernos que después paso a limpio. Así lo hago. Y el final, ese suelo tan solo perfilarlo en papel para terminarlo en el ordenador. Manías y curiosidades.
Alguna vez, he escrito como un brújula, pero no ha terminado de gustarme. Al final, mi tendencia era la de planificar. Por eso, creo yo, que me gustan las líneas temporales, los corchos llenos de ideas y las paredes, al más puro estilo policial peliculero, con fotos, mapas, notas, etc.
Y vosotros, decidme. ¿Qué tipo de escritor sois?