Título: Cabal. Razas de noche.
Autor: Clive Barker
La factoría de ideas (2010)
Cabal. Razas de noche fue mi primera aproximación a la literatura de Clive Barker, pero no la última. No se parece a nada de lo que haya leído con anterioridad en cuanto a terror se refiere. Cuando la empecé no tenía claro de qué iba o de si me iba a gustar, pero resultó una novela sorprendente. Me enganchó y consiguió que en algunos momentos sintiera verdadera angustia y miedo. Hacía tiempo que una obra de terror no conseguía provocar esa sensación en mí.
La novela trata de Aaron Boone, un joven atormentado por las horribles pesadillas que padece en las que se ve cometiendo los crímenes más sanguinarios y atroces: el asesinato y la mutilación de once personas. Su psiquiatra, el doctor Decker, tras largas sesiones de terapia, le convence de que su mente enferma ha hecho que olvide los recuerdos de esos asesinatos que sí han ocurrido en realidad, pues no son simples pesadillas.
Boone, frente a la imagen de ser es un asesino sin lugar entre los humanos, confuso y horrorizado, se olvida de los vivos, de su vida y de su novia Lori. Comienza a pensar que la salvación a su terrible condición se encuentra en un lugar llamado Midian. Una terrible y legendaria ciudad que cobija y da calor entre sus muros a los medio muertos; a las razas de noche. Parece su único refugio.
Emprende así su huida hacia esa urbe monstruosa que se extiende kilómetros bajo un cementerio. Allí, Boone vivirá con las criaturas que lo pueblan y será rebautizado como Cabal. Lori, su novia, incapaz de creer que Boone sea el autor de esos horribles crímenes, va a buscarlo, sin saber a ciencia cierta si está vivo o no. Ella lo quiere y está dispuesta a todo por recuperarlo. Por su parte, el doctor Decker también desea hallarlo, pero con intenciones totalmente distintas.
Cabal no sólo es una novela de terror, sino una obra de brillante imaginación donde también hay amor. El amor entre un hombre desequilibrado por las malas pasadas de su mente y una joven que lo daría todo por recuperarlo. Una mujer dispuesta a atravesar los límites de lo humano para estar con él. También hay amor entre las razas de noche que a pesar del miedo que provocan entre los naturales (como llaman a los vivos), tan sólo quieren vivir en paz.
Y hay terror. Por supuesto que hay terror. Miedo, horror, sexo y turbación. Pero eso es Clive Barker, un escritor capaz de hacer que cuando leamos sus novelas nos paseemos por lo estrambótico, lo perverso y lo terrorífico. Crea un mundo en el que nuestros mayores miedos aparecen a nuestro lado, acompañándonos.
Cuando leemos esta novela, esa mezcla de terror y amor hace que sea una obra asombrosa donde, como en la propia vida, las apariencias engañan y el verdadero espanto no está escondido en los muros de Midian. El verdadero horror se esconde en los corazones y en el miedo a lo desconocido de la propia raza humana.